Opinión: Si fuera el senador de Barahona.

 

POR XAVIER CARRASCO

En la República Dominicana, como en el contexto de los países del mundo, con esta modalidad, un senador es un representante electo que forma parte del Senado, en el caso de nuestro país, la Cámara Alta del Congreso Nacional.

Cada una de las 31 provincias que conforman el territorio de nuestro país, así como el Distrito Nacional, cuenta con un senador, elegido mediante voto popular, directo y secreto para un período de 4 años, la misma forma de escogencia de quienes nos representan en el Poder Ejecutivo.

El rol principal del senador es legislar, fiscalizar y representar, lo que implica proponer, discutir y aprobar leyes que beneficien al país. Además, los senadores supervisan las acciones del Poder Ejecutivo, ratifican tratados internacionales y nombramientos de funcionarios claves, como embajadores, jueces de la Junta Central Electoral, miembros de la Cámara de Cuentas y la participación dos senadores en el Concejo Nacional de la magistratura para la escogencia de jueces de las Altas Cortes de Justicia del país.

En su función, el senador también actúa como defensor de los intereses de su provincia, promoviendo iniciativas que impulsen su desarrollo económico, social y cultural, esto los convierte en actores fundamentales en la consolidación de la democracia y el progreso nacional.

Si yo fuera senador de Barahona mi compromiso estaría basado en tres pilares fundamentales: legislación efectiva, representación cercana y fiscalización responsable.

Estos indicados tres ejes, desde nuestra perspectiva, resultan esenciales para garantizar el desarrollo integral de nuestra provincia y el bienestar de sus ciudadanos o ciudadanas.

Barahona, con su riqueza agrícola, necesita un marco legislativo que fomente la inversión del estado y a su vez la modernización de la agroindustria, el acceso a créditos blandos para los productores y la capacitación técnica. Esto permitirá que nuestros productos compitan a nivel nacional e internacional.

Promovería incentivos fiscales para empresas y emprendedores que desarrollen proyectos turísticos enfocados en el ecoturismo y el turismo cultural, destacando las maravillas naturales de nuestras playas, balnearios y montañas.

Propondría un plan integral para la mejora de carreteras, acceso al agua potable en comunidades y sectores donde aún es de difícil acceso el preciado y electrificación rural, asegurando que cada pueblo de la Provincia tenga las herramientas necesarias para crecer.

Impulsaría programas de formación técnica y profesional, especialmente en áreas como tecnología, educación universitaria y servicios, para garantizar que nuestra juventud tenga oportunidades laborales dignas.

Establecería una oficina móvil que visite regularmente cada municipio y distrito municipal. Así como los diferentes barrios y sectores de Barahona para escuchar de primera mano las necesidades de la gente y canalizarlas de manera efectiva.

Crearía espacios de consulta ciudadana, utilizando tanto medios tradicionales como digitales, para que las comunidades participen activamente en las decisiones que impacten su desarrollo.

Representaría con firmeza los intereses de nuestra provincia ante el Congreso Nacional y el gobierno central, exigiendo mayores inversiones en salud, educación y seguridad ciudadana.

Velaría porque los recursos asignados tendentes a la consecución de obras del estado a Barahona sean utilizados de manera eficiente y transparente, garantizando que las obras públicas y los programas sociales se ejecuten correctamente y beneficien a quienes más lo necesitan.

Propondría la creación de una comisión especial para supervisar la ejecución del presupuesto destinado a la provincia, involucrando a líderes comunitarios y organizaciones sociales en este proceso.

Como senador, rendiría cuentas periódicamente a los ciudadanos, explicando cómo se gestionan los recursos y qué avances hemos logrado en los proyectos impulsados, tomando en cuenta aquel eslogan de un ex senador de la provincia, de que solo el que trabaja puede rendir cuentas.

Barahona es una tierra rica en recursos naturales, cultura y talento humano. Mi propósito como senador sería transformar estas fortalezas en oportunidades concretas para todos. Con una gestión legislativa centrada en el desarrollo, una representación cercana y una fiscalización efectiva, podemos construir una provincia próspera, equitativa y sostenible.

Juntos, podemos convertir a Barahona en un modelo de progreso para toda la República Dominicana.

 ¡El futuro de nuestra provincia está en nuestras manos!

El autor es abogado, comentarista de radio y político